Pocas cosas me resultan tan reconfortantes en invierno como las bebidas calientes. En esta ocasión elijo un latte vegano de especias. ¿Te apetece conocer sus beneficios?

A causa del aumento, en los últimos años, de diagnósticos de intolerancia a lactosa, cada vez hay más marcas y supermercados que nos invitan a beber  bebidas vegetales diferentes. Las más conocidas son las de soja, avena –que ahora incluso se puede encontrar sin gluten– y la de arroz. Pero también podemos encontrar de almendras, avellanas, quinoa, mijo, espelta, kamut, teff, castaña, chufa, nueces, sésamo, girasol e incluso coco.

 

Las bebidas vegetales son más nutritivas que los zumos envasados, que no tienen vitaminas y solo contienen azúcares y son una buena opción si la leche sienta mal, hay alergias o intolerancias. Calientes en invierno y frías en verano, después de hacer deporte como remineralizante o a media tarde como ansiolítico.

 

Propiedades del latte vegano de especias para el cuerpo

 

  • Muy sabroso. Al mezclar una leche vegetal con un fruto seco, su textura densa y cremosa alegra a nuestro paladar y a nuestro estómago.
  • Poder nutritivo: Las proteínas y grasas de los frutos secos son saludables. El anacardo hace de esta bebida un latte generoso en magnesio, hierro y vitaminas del grupo B.
  • Evita los estados de ansiedad: El dulzor se potencia con las frutas secas y da una energía de relajación. Nos remineraliza con el cacao, fuente de fenil-anilina, un aminoácido esencial que equilibra los estados de ánimo y por último, la avena que nos ayuda a aliviar los estados de ansiedad y a estabilizar los niveles de azúcar.
  • Tónico digestivo: Su combinación de aromas nos traslada a lugares soñados y nos despiertan el fuego digestivo, mejorando nuestras digestiones y nuestro ánimo.

 

Receta de latte vegano de especias

 

  • 30 g de anacardos crudos y previamente remojados (4-6 horas)
  • 200 ml de leche de avena
  • 1 c.s. de polvo de algarroba.
  • 1 c.s. de frutas deshidratadas picadas (ciruelas pasas, orejones de albaricoque, pasas de Corinto y pasas sultanas)
  • 1 c.s. de mezcla de especias en polvo: canela, cardamomo, vainilla, clavo y jengibre.
  • TOPPIN: nibs de cacao y canela en polvo.

PREPARACIÓN:

  1. Batir con la batidora hasta conseguir una consistencia cremosa y fina.
  2. Calentar el latte y decorar con el topping.

 

NOTAS:

  • Los higos y los dátiles no los recomiendo como frutas secas de consumo diario. Energéticamente son extremadamente yin y no contienen un equilibrio en su relación sodio/potasio.
  • El chocolate caliente todavía puede ser un tratamiento ocasional. No debería ser un alimento cotidiano. Así como el cacao contiene cafeína y tiene cualidades tóxicas, incluso cuando se etiqueta como «crudo».
  • El “chocolate” de algarroba es una buena alternativa al cacao, porque es muchísimo más bajo en grasas (sólo el 3%) frente a un 40% del cacao.

 

cafe latte